El Nacimiento de Reiki Fuego Sagrado

El Fuego Sagrado llegó rápida e inesperadamente a mi vida, ya que no estaba buscando algo tan poderoso y transformador como esto.

Me di cuenta por primera vez de ello, y de que lo enseñaría, en enero de 2014, un día antes de que impartiera una clase de entrenamiento de Maestría en Reiki.

Me mostraron el símbolo, recibí la sintonización y la información de cómo darlas  durante tres sesiones matutinas que tuve con un consejero espiritual.

También me explicaron que la energía del Fuego Sagrado necesitaba conectarse a mi de manera única y que esto requeriría que se liberaran los símbolos tibetanos y la energía de la llama violeta. Estas energías habían cumplido su propósito y me habían ayudado a avanzar hasta este punto y también fueron valiosas en la sanación que facilitaron para otros, pero era importante que las dejara ir.

Una vez que di mi permiso, la energía del Fuego Sagrado entró y de manera respetuosa creó los cambios energéticos necesarios para que esto sucediera. 

Por supuesto, todo esto fue una gran sorpresa para mí, pero la energía era tan fuerte y la guía tan clara que encontré apropiado aceptar el proceso y seguir las instrucciones para enseñarlo.

El fin de semana antes de la clase mencionada, enseñé una clase de Reiki I y II en la que la sintonización de Nivel II y la energía curativa que recibimos fueron tan poderosas como una sintonización de Karuna Reiki. Siento que esto debe haber sido una preparación para el Fuego Sagrado.

Pre-Sintonización

Ese viernes me guiaron para realizar una meditación previa a la sintonización antes de la sintonización de Maestría. Me guiaron para minimizar la orientación que di y simplemente ayudar a los estudiantes a estar en un estado receptivo, permitiendo que la energía del Fuego Sagrado se hiciera cargo y guiara a cada uno individualmente.

En ese momento les sugerí que confiaran en la luz y permitieran que guiara su experiencia. Luego me senté a meditar en silencio durante unos 20 minutos y luego sugerí regresar. Después de esto compartimos nuestras experiencias y la mayoría de los estudiantes describieron una experiencia de limpieza y purificación en la que sintieron que estaban siendo preparados para recibir el Fuego Sagrado. Describieron que sus chakras se abrieron y se purificaron,  algunos también describieron que se liberaron de espíritus con el entendimiento de que ya no eran necesarios. Este proceso de limpieza continuó después de la meditación, y me dijeron que tomaría alrededor de 24 horas completar este proceso antes de que cada uno estuviera listo para la sintonización de Maestría, razón por la cual se hizo el día anterior.

Sintonización de Maestría

Al día siguiente hicimos la sintonización de Maestría al aire libre, ya que el clima en Maui, donde se impartía la clase, era cálido y soleado.

Once estudiantes estaban sentados en fila. Primero los guie en una meditación de enfoque y elevación de vibración. Luego, después de un minuto más o menos, dije: “El proceso de sintonización comenzará ahora. Permanece con los ojos cerrados y tu atención enfocada en tu experiencia interna. La sintonización se guiará a sí misma, así que permítete ser receptivo y sigue la guía de la energía.” Y eso fue todo lo que hice. Permanecí sentado y no interactué físicamente con los estudiantes en absoluto. Esperé unos 20 minutos y durante este tiempo hice oraciones dando gracias por todos los beneficios que estaba recibiendo cada estudiante. Después de este tiempo, sugerí que cada estudiante regresara cuando fuera el momento adecuado y que después de esto, a su propio ritmo, escribieran sus experiencias en sus cuadernos o permitirían que se produjera una integración.

Cuando escuché que la música  llegaba a su fin, salí al salón de clases y encontré a todos los estudiantes sentados en nuestro círculo de salón. Dijeron que si bien las iniciaciones eran una experiencia individual su experiencia termino y volvieron al mismo tiempo todos. 

Le pedí a la gente que compartiera sus pensamientos sobre su experiencia. Cada uno tenía su propia experiencia interna, pero un estudiante dijo que al final y justo después de que me fui, pidió que le dieran una señal física muy definida para saber que la sintonización había tenido lugar. En ese momento, ella y los demás experimentaron un viento muy fuerte y contundente que también contenía una fuerte energía espiritual. El viento los rodeó por detrás y cuando abrieron los ojos, vieron un pequeño viento parecido a un tornado que rodeaba la silla en la que me había sentado. El viento llevaba muchas hojas dentro de su vórtice y daban vueltas rápidamente alrededor de la silla; luego la silla fue levantada unos 20 pies en el aire por el vórtice del viento y giraba muy rápido y luego fue arrastrada por el patio a unos 100 pies de distancia. Mientras esto sucedía, los estudiantes, que acababan de salir de una experiencia de sintonización profunda, se sentaron con los ojos muy abiertos mientras observaban cómo ocurría esto. 

Las experiencias de sintonización que los estudiantes habían tenido tenían algunas similitudes. El Fuego Sagrado, que ardía muy fuerte y era una llama multicolor, se había instalado en un espacio a unos centímetros debajo del ombligo. Ubicado cerca del lugar al que a menudo se hace referencia como el diantien, me dijeron que este no es el diantien, sino que está cerca y resuena en un nivel vibratorio mucho más alto. La llama purifica, y dondequiera que purifica libera energías discordantes, reemplazando esas energías con el Fuego Sagrado. Algunos podían ver la llama; otros podían sentirlo de varias maneras. Un estudiante dijo que producía un sonido parecido a un zumbido que se asemejaba al sonido de Om, aunque no exactamente igual, y que le daba una sensación de poder espiritual. Otros dijeron que era como el calor. Algunos dijeron que la llama rodeaba todo su ser. Era purificador pero también sanador y fortalecedor. Muchos tenían la sensación de que todas sus preocupaciones por el futuro habían desaparecido y eran reemplazadas por la sensación de que el Fuego Sagrado estaba  cuidando de todo por ellos de una manera muy saludable, pacífica y efectiva. Esto produjo un sentimiento de confianza que engendró la libertad de disfrutar el momento presente, sabiendo que todo estaba bien.

También fue evidente que el Fuego Sagrado, una vez encendido en el estudiante, continúo creciendo en fuerza y vibración, limpiando más profundamente y curando y empoderando de maneras cada vez más poderosas. Esta característica da una sensación de profundidad a medida que contemplamos la experiencia de una purificación, sanación y empoderamiento cada vez mayores. 

Durante las sesiones de Reiki cuando practicábamos con la energía del símbolo Fuego Sagrado, algunos vieron llamas saliendo de las manos que parecían fluir por todo el ser del cliente y, a menudo, lo rodeaban con una llama viva. Se expresaron sentimientos de profunda paz y sanación al compartir nuestras experiencias.

La introducción de la experiencia del fuego Sagrado hace que las iniciaciones sean más fáciles de realizar ya que no hay aliento violeta, no es necesario sostener el hui yin o la lengua y no se usan los símbolos tibetanos. Además, la sintonización de Maestría requiere que el Maestro de Reiki haga poco ya que no hay interacción física con los estudiantes, solo una meditación guiada simple y breve. La calidad y naturaleza de la energía también facilita el proceso de enseñanza y da mayor significado a las experiencias que los estudiantes tienen en clase.

También hay una tranquilidad al saber que el Fuego Sagrado guiará y empoderará su propio camino hacia adelante para extenderse a todos aquellos que estén dispuestos a aceptar sus bendiciones.

William Lee Rand. En: www.reiki.org/birth-holy-fir